Según el jefe del Banco Mundial para América Latina y el Caribe «hay una situación de fragilidad en Sudamérica especialmente». Los últimos datos arrojados por la entidad que preside indican que los países más endeudados son Venezuela, Argentina y Brasil.
Cuando se trata de una deuda fiscal, lo que analizan los economistas es la relación entre la deuda pública de un país y el tamaño de su economía, expresada como porcentaje de su PBI (Producto Bruto Interno). Si un país tiene mucha deuda, eso afecta directamente a la calificación de riesgo que le ponen los mercados.
«El endeudamiento de los países de la región es preocupante», indica el economista Carlos Vegh, jefe por Latinoamérica y el Caribe de la entidad mundial que ofrece créditos, asistencia y recursos personalizados a más de 100 países en desarrollo y en transición
En Argentina, al inicio de este año, los mercados lo consideraban ejemplar en la aplicación de reformas y le daban su voto de confianza. Meses después, se disparó la inflación y se recurrió al FMI a solicitar un rescate de US$57.000 millones. A cambio del préstamo, Macri se comprometió a bajar el déficit fiscal a 0 en 2019, un ajuste de gran magnitud que puede acarrear fuertes costos sociales y políticos que comprometan el futuro del país.
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